quasi una fantasia
Olivia apareció de repente con un conjunto de lencería negro. Se fue deslizando sobre el cuerpo de Tomás hasta llegar a sus labios. Lo besó apasionadamente. Se quitó su ropa interior y la tiró de un lado.
Tomás la aguantó por la cintura. Se arrimó a sus pechos acariciando con su lengua uno de sus pezones cuando ella lo interrumpió:
- “¿Por qué sigues soñando conmigo?”
Tomás rodó los ojos.
-“Pero ¿es posible que interrumpas el momento hasta cuando te estoy soñando?
-“Lo siento pero me parece un poco jodío que después de tanto tiempo sigas metiéndome en tus sueños.”
-“No, no...Olivia, no. Éste es mi sueño. No tienes derecho a dañar mi fantasía.”
-“En serio, mijo. ¿Y esa ropa interior? No puedes por lo menos imaginarme con algo más decente...”
-“Véte a pelear conmigo en tu cabeza.”
-“Si es tu sueño, entonces puedes callarme sin ningún problema.”
Tomás la miró de reojo.
-“No sé por qué pero estoy empezando a creer que eso es imposible.”
-“No me has contestado la pregunta.”
La recostó en la cama y le besó el cuello. Ella lo apartó, aguantando su cabeza para mirarle a los ojos.
-“Díme por qué...”
Tomás abrió los ojos y ante él se iba enfocando el paisaje caótico habitual. Maldita sea, pensó para sí tratando de registrar bien lo que había soñado.
En eso se abrió la puerta. “¿Te desperté, cariño?” Tomás giró su rostro hacia ella. “No, tuve un mal sueño, eso es todo.” Ella se metió en la cama y lo abrazó. “Pobrecito”, suspiró mientras se acercaba a sus labios para besarlo. “Te quiero mucho, Tomás”, dijo con los ojos cerrados. La sostuvo entre sus brazos. “Yo también.”
Cerró los ojos y trató de retomar la escena donde se había quedado.
Labels: ficción, Olivia y Tomás
Ay no me digas que la que llego al cuarto no era Olivia. No, ella no era, ella no es asi de cariñosa con el. Que fastidio yo queria que fuera verdad, q al fin Olivia y Tomas se queden juntos!! Bueno un abrazo a la escritora!
P.D Bien sabes que soy fanatica de Olivia y de Tomas!
Mares: jeje, sospechaba que te divertiría leer más de Olivia y Tomás. No quería escribir más sobre estos personajes. Escribí el cuento usando otros nombres pero me di cuenta que seguían siendo ellos. Así que los respeté. Malditos! me persiguen! jeje
Yo creo que si Olivia y tomás llegaran a estar juntos se matarían...
un abrazo
Excelente!
Creo no haber leido jamas una descripcion tan excelente como la de un sueño tan vivido como este!
Me gusto no-apta y me da nostalgia porque me paso algo parecido anoche, lo unico que fue una pesadilla... buenisima para contarla. Tal vez me anime y la ponga en mi blog.
Saludos!
Eso demuestra que no podemos controlar nuestros sueños ... o Sí????
besos felinos
cualquier parecido con la realidad, es mera coincidencia...
uffff
me has dejado pensando...
!!!
besos:)
jajaja..esta olivia se las trae hasta en los sueños de otro..me encantan los relatos de olivia y tomás, siempre tratan algo en serio y algo en broma.
un abrazo.
No apta, me acabo de pasar horas metida en tu blog... gue genial esta la historia... me ha conmovido mucho.
Tu espacio me encanta, cada imagen y cada linea es un viaje.
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Hay un realismo impresionante en ese diálogo y la situació vivida entre Tomás y su sueño.
La resignación de la respuesta "Yo también " a su mujer, me deja la duda existencial, si Tomás a Olivia tan sólo la sueña, o la tiene a su lado en la realidad, pero desearía qeu sea como la Olivia del sueño, no como la que se acostó a su lado, tal vez sin una lencería adecuada.
Un besito NO APTA, me encantó la idea y el relato.
Te agradezco anque algo demorado por razones de fuerza mayor que habrás notado en el post anterior al actual, vengo a agraecerte mucho tus visitas y tus comentarios.
Un besito
Genialidad total, No Apta. Genialidad.
Buen relato, interesante blog.
Te leo
Saludos Dominicanos
Jay: Ay, gracias por el comentario y por la visita.
Saludos
Lil Tinkerbell: Tan terrible cuando uno tiene esos sueños. Ni modo. Eso sí, escribirlos ayuda a entender muchas cosas. A ver si te animas...
un abrazo
Gatto: Hay quien dice que uno puede controlar los sueños. Yo todavía no lo he logrado...o quizás sí, bah, ¿quién sabe?
un abrazo
cieloazzul: jajaja...Sucede en ocasiones, nada que se pueda hacer...
Saludos
Ojitos: jeje, sí, Olivia es jodona hasta en el inconsciente...mmm, creo que es precisamente esa dualidad que mencionas lo que me hace seguir escribiéndolos.
un abrazote
Glifo: No quería continuar con estos personajes, de veras que no...pero creo que todavía los necesito. No sabes lo mucho que me encantó la idea que mi blog sea un viaje, jajaja, me hiciste el día con eso. A mí me fascinan tus escritos. Eres genial!!
un abrazo
Navegante: Muy interesante esa interpretación. Me quedé pensando mucho. Yo he construido la historia de Olivia y Tomás partiendo de la premisa que ellos mismos se obstaculizan. Creo que si se juntaran en serio se terminarían matando...pero ahora tras leer este comentario pienso que quizás si se juntan mucho de lo que los atraía mermaría y se encontrarían aburridos o resignados, soñando con el Tomás o la Olivia del pasado...mmm...nunca lo había considerado.
Gracias
un abrazo
Yolanda Arroyo Pizarro: Wow, viniendo de una cuentista y escritora tan genial me quedo sin palabras...
Muchas gracias.
Patricia Minalla: Me alegra que te haya gustado. Siempre estás bienvenida.
Madam: Ay, amiguita, ¿qué puedo decir? Olivia es terca como esta terca que la escribe, jajaja...
A mí me gustó mucho la idea de que se rebelara de la fantasía, muy al estilo de Olivia. A mí me encantaría tener ese poder...¡sería genial! (siempre y cuando no me lo hagan a mí, claro está)
ay M, qué cosas. me agradó volver a ver a estos personajes por aquí, como diría el refranero- mala yerba nunca muere. aunque creo que tienes razón, si llegan a estar juntos se matarían. por qué hay tanta violencia en la pasión, el amor y el deseo? por qué hay violencia en el silencio? en el placer, acaso? yo me conformo con que olivia y tomás sigan explorándose. aunque nunca llegue a ser una historia feliz o nunca se sientan satisfechos, habrán aprendido muchas cosas casi útiles, y tú segurás escribiendo cuentos filosos y cortantes como pedacitos de algún extraño espejo roto. gracias.
-n
Nicole Cecilia, jamás podré expresarte lo mucho que me trastocó la comparación de estos cuentos con un espejo roto. Creo que por eso mismo tengo resistencia a seguir escribiendo aquí sobre ellos. Me hieren como no tienes idea. Pero como dije, los necesito. Así que creo que me seguiré cortándome con estos pedazos más tiempo. Yo creo que Olivia y Tomás van a terminar matándome, o volviéndome loca...está por verse.
He aprendido que no hay violencia más agresiva y desesperante que la que se esconde en esos silencios palbables, los mismos que rodean a estos dos personajes. Cada vez estoy más segura que nunca podrían estar juntos. Pero tienes razón, es mucho lo que se llevan de todo esto.